CINCO POEMAS DE SALVADOR ZAMBRANA
En esta ocasión presentamos cinco textos inéditos del poeta nicaragüense Salvador Zambrana.
LAVORARE STANCA
En la oficina,
entre cubículos, cabizbajo
a sospechas del ring-ring de una llamada fría,
me hacía falta tu mensaje.
El jefe me sorprendió esta mañana
escribiéndote un poema
que es más bien relato de mi monotonía.
TRASCIENTE
Supuse la gloria, el estrado, el poder
y solo hacia las calles recorridas voy
persiguiéndome a mí mismo para encontrarte
mucho antes que tú nacieras.
En los andenes, las carreteras, te he buscado
en múltiples rostros de tanta gente, ni así.
27
Quería llegar a esta edad
donde lo que digan los demás importe poco.
Soy la otra oveja negra en la familia.
No rendiré cuentas a nadie.
Sin arrastrar a ninguna mujer a mis instintos
viscerales
me he ido preparando desde algún tiempo
para morir en soledad, y loco.
IV
A la libertad, declamo: ¡Oh! tu sombra
que posó cuaternaria mi destino. Maestra de los campos.
Un hombre debe soñar una vez al menos cada siete días.
ÉL
Intervino en Él, sin correspondencia alguna,
no sabría cómo descifrar o responde
a la pregunta del por qué el laberinto.
Si en principio el Huevo es una armadura
-se rompe a grietas- no hay ningún camino por prevalecer
entre la divina elevación, lo descendente, el paraíso
de hombres que no debieron haber escrito nunca.
