Salvaje Sur; Western y Gauchesca desde la Patagonia

La revista se edita desde San Martín de los Andes y ya circula por toda la Argentina. Combina algunos géneros literarios clásicos del siglo XIX y XX mientras que atiende cuidadosamente su propuesta estética. Narraciones breves, ilustraciones handmade y pseudónimos. Bienvenidos al Viejo Oeste, a La Pampa, a la Patagonia, a Salvaje Sur.

Por Nicolás Diana

“El hombre llegó con el sol naciente, cabalgando desde el este, como si hubiera sido escupido por la mañana. No dio de beber a su caballo, no se detuvo en el saloon ni respondió los saludos de los niños curiosos que agitábamos la mano desde la única ventana de la escuela. El hombre solo tiró de las riendas cuando llegó frente a la pequeña capilla construida por los irlandeses. Ahí se quitó el sombrero. Y saludó al padre, al hijo y al espíritu santo. Después, hizo girar su caballo y partió rumbo a la mina de oro abandonada.”

Gil Pender abre la edición número 1 de Salvaje Sur con este relato Western clásico. Tan solo dos páginas son necesarias para marcar el camino; Caballos, hombres misteriosos, polvo en el viento, pueblos perdidos en el desierto.

Gil Pender es en realidad Matías Castro Sahilices, el director del proyecto. Quien ha decidido llevar adelante esta aventura que ya imprimió tres entregas y realizó múltiples reimpresiones de las mismas. Pero, ¿Cuál es la chispa que enciende este fuego? ¿Quiénes son los que se acercan a escuchar estas historias? ¿Cuál es la inspiración del editor?

Matías es escritor y editor. Vive en San Martín de los Andes desde 2010 y trabaja en diversos proyectos editoriales. Desde Marzo de 2021 lleva adelante este proyecto que tiene la misión de ser una revista “para lectores particularmente exigentes que buscan una experiencia ligada a la nostalgia”.

Quien produce este material es totalmente consciente del terreno difícil en que ha decidido tranquear; “Yo a diario, en las editoriales hago un laburo digital, y esto que hacemos es todo lo contrario, en algún momento voy a tener que cambiar el chip”. Una especie de nado contra la corriente, una aventura de rescate que de a poco va sumando adeptos. Apostar al papel en tiempos de pantallas por todas partes. En palabras del autor: “Hay una pata puesta en esto del rescate, al aparato gráfico y la otra pata importante es el de la literatura”.

Respecto al plano literario, Matías está muy conforme con el plantel que ha ido formando a través de estos tres ejemplares publicados: “Trabajo con gente que tiene gran calidad, los escritores que trabajan conmigo tienen gran calidad, raramente tengo que sugerir cambiar algo”. Los escritores de la edición número 1 son de la Patagonia Argentina, aunque de a poquito se fue ampliando la cobertura territorial de la misma y en los siguientes números se pueden ver trabajos de escritores de todo el país, como por ejemplo un escritor de Catamarca.

La revista tiene un formato pequeño DIN A5 (148 x 210), y cuenta con una tapa y contratapa blanda de excelente calidad e impresión a color. En el interior nos encontramos con un papel blando, de muy buena calidad, impreso en tinta negra. El diseño está cuidadosamente trabajado para recrear estéticamente el mundo Western; avisos publicitarios alusivos a la época, fanzines, y tipografías clásicas de los carteles con la leyenda “WANTED”. Además cuenta con dos ilustradores que recrean a la perfección las exigencias del editor. Todos los relatos están acompañados de un dibujo inspirado en la historia, trabajo que realizan Javier Mattano y Diego Fiorucci.

Matías demuestra ser un gran conocedor y apasionado por el mundo Western: “Consumo todo lo que se te ocurra de western; series, películas, literatura, música, pero la idea final es desembarcar en el PULP”. La revista tiene la estética y las historias del lejano oeste, combinado con el faro del género PULP, que se caracterizó por publicaciones simples, con mucho dibujo, color, e historias de pura acción.

Cada revista trae un regalo particular. Al abrirla, uno se encuentra con un papel blanco doblado en 4 partes. Es un cartel con alguna historia breve o una recreación del clásico cartel : «WANTED». La idea de los fanzines ya la traía de un proyecto anterior, y ahora es un regalo extra con el que agasaja a su público: “Teníamos una editorial artesanal y habíamos empezado a hacer rescates de grabados, y ahora me quedó la idea para plasmarla en los carteles de “Buscado”. El regalo suele costar más trabajo que el resto de la revista, ya que la búsqueda de imágenes originales, fuentes y diseños, es un trabajo bastante arduo. La edición n° 3 por ejemplo trae una replica de un aviso de la Policía de La Pampa Central, referido a la búsqueda del bandido popular Juan Bautista Bairoletto.

Este proyecto ya se está haciendo cada vez más federal, lo cual es un gran impulso y a la vez un compromiso con los lectores de todo el país que esperan la edición n°4: “Me han pedido revistas desde Tierra del Fuego hasta Jujuy”.

La conversación que tenemos a la distancia con Matías se hace muy entretenida, y enseguida la temática nos obliga a cruzar esos géneros que tanto tienen en común: El western y la gauchesca. Las similitudes aparecen enseguida: “El culto al caballo, el hombre contra la naturaleza. Hay muchas similitudes entre las guerras civiles nuestras y las norteamericanas. Los buscadores de oro”. Por tal motivo, la tercera edición de Salvaje Sur lleva la insignia “Gauchos y bandoleros”.

Entrar al terreno de la gauchesca, por estas pampas, no es cosa sencilla. Un género importante y discutido en el plano académico. Pero el editor se siente muy confiado en que es un espacio para explotar, muy rico en historias y al cual hay que tomar muy enserio; “Hay para hacer un laburo teórico muy importante sobre la gauchesca y el gaucho. No estoy de acuerdo con un montón de teorías sobre el gaucho; por ejemplo la que dice que al gaucho le usaron el cuerpo en las guerras civiles y la voz para fundar la gauchesca. Una visión más unitaria no puede haber. Anda a decirle a un gaucho federal que a él le han usado el cuerpo. Esa visión no tiene en cuenta lo que pasaba en Entre Ríos, en Santa Fe y en Corrientes con los gauchos que estaban convencidos de que la causa federal era lo más importante.”

Salvaje Sur es entonces un espacio de aventuras, que busca acción, que pasen cosas. Una revista de entretenimiento, que apela a la nostalgia de aquellos que han leído el género, pero también puede colocarse como un vintage muy interesante para públicos más jóvenes.

La edición número 2 finaliza con un poema de James Barton Adams , veterano de la guerra civil, vaquero, periodista, editor y pionero del Western poetry. Publicado en 1889, aquí un fragmento. Léase a la sombra de un tala, mascando tabaco, pero no se descuide tanto, recuerde bien por donde está pisando.

“Tomaba una vida tan rápido como un trago,

Y su pistola era más veloz que un guiño de ojos.

Se jactaba de las muchas tumbas que su mano había llenado,

Y de los cubos de sangre que había derramado con humor.

(…)

Una vez se dirigió al estado de Colorado

Y consiguió un maravilloso negocio en el mejor momento de Creede,

Y a medida que el dinero se acumulaba, su dureza se desvanecía,

Y su lengua evacuaba menos blasfemias que en los primeros tiempos.

Así fue que se obligó a dejar de matar hombres por diversión,

A ocupar el lugar de su pistola con un talonario de cheques

Y a dejar que la suavidad borrara el antiguo rostro endurecido