CARLOS EMILIANO OSELLA – El Arte (De “Los montruos de Alicia”)

El Arte (De “Los montruos de Alicia”)

El Arte es el monstruoso padre
de asesinatos e incendios,
sol de verano que justifica suicidios continuos
sobre la orfandad de las cosas,
que muertas se deshacen en los ojos,
crujiendo en el fuego como la madera.
Imagen de la imagen,
máscara de la luz abismal
imagen en la imagen,
aquello que se hereda luego se abandona
para que se queme en las crepitaciones del aliento,
solo algunos despojos sobreviven al fervoroso calor del abrazo,
por ello cada trazo,
cada palabra
teme, y seguirá temiendo, su juicio de patriarca anquilosado.
El arte solo es un viejo sentado en la solemnidad antigua de su trono.

Perdón (De “Gulliver en casa”)

Creo que te amé,
te amé de seguro,
pero fui egoísta, lo sé.
En vez de ser un héroe que regresa desarmado y que con un beso destruye
todas las penurias pasadas,
todas las carencias sufridas,
todas las noches desiertas,
fui solo un monstruo que regresó insaciable, insatisfecho,
un cuerpo guarecido en una puerta,
un cuerpo sin alma que deambulaba por la casa, ajeno a los otros,
con la mirada obtusa enfocada tercamente en mi propio ombligo
y mi rostro esculpido en la sed de volver a marchar,
un ser resentido, avaro,
que pensaba todo el tiempo en que era una Galatea acosada
y, en realidad,
era un colérico Polifemo que no soporta que no lo amen solo a él.
Aceptaste sumisa el engendro vacío que terminó en tus brazos,
el sonido de los pasos arrastrándose,
los gritos en las noches,

y lo peor de todo fue que te acostumbraste a mis desprecios,
a que te ignorara demostrando cuán infame puedo ser:
soy todo lo que no debí ser,
soy una piedra que se lanza con furia,
soy una envidiosa manzana envenenada,
soy una aguja embrujada con desprecio,
soy un vendedor de pájaros afónicos,
y, ahora,
como un patio de escuela en vacaciones,
como unos zapatos de un bebé muerto en una caja,
lo único que tengo,
lo único que me queda
es tu ausencia…

Fuga de mentes (De “La autopsia de Frankenstein”)

La ciencia posiblemente nos destruya
con la belleza de un rilkeano ángel terrible
y sus torpes caricias de cielo.
Pero veo desnudo ahora el cerebro de la bestia
y pienso,
pienso en un mañana mejor,
pienso que el saber
no es una presuntuosa torre de Babel buscando un intransigente dios,
pienso que quieren condenar nuestro futuro con distopías que encarcelen
las capacidades de imaginar,
y el irrefrenable destino humano de crear,
asesinando prometeos indecentes,
escondiendo las mejores chances de perfeccionar nuestro acaso
y nos quieren hacer pensar que acabaremos en un mundo conduciendo autos
fabricados con chatarras
y, con sus libros, con sus series y películas, quieren castrar todo lo posible
para que perdamos nuestras esperanzas de perdurar como especie,
para que nos concentremos en las superfluas ansias de consumo
que nos paralizan en un lugar,
un lugar exclusivo para el rebaño
que solo anhela que el pasto alcance.
Y los científicos serán dementes y obtusos,
egocéntricos y caprichosos

y dirán que son todos iguales
y que desean que su ombligo crezca
en el reino del pretérito negocio de la fatalidad asegurada,
en la que se paga todo con sueños e independencia.
No debemos caer en la trampa de lo preconcebido.
Obliguemos a los pensantes a encontrar una manera decente de sobrevivir
de forma completa, sublime y sustentable.
No dejemos que lo maravilloso se nos niegue.

Fisión Binaria (De “La eternidad de lo imperceptible”)

En condiciones favorables,
la soledad dura,
quizás,
minutos.
Replicarse indefinidamente
será la manera eficaz de trascender,
será la fugaz esperanza de lograr
una trampa estructurada,
matemática,
y orgánica
para engañar a la muerte.
La soledad y la muerte,
en condiciones desfavorables,
son lo mismo.

Extremófilos (De “La eternidad de lo imperceptible”)

Anhidrobióticos.
Acidófilos. Alcalófilos. Barófilos. Osmófilos.
Halófilos. Radiófilos. Psicrófilos. Termófilos.
Criptoendolitos.
Oligotrofos. Litoautótrofos.
Metalotolerantes.
Tardígrados.
Poliextremófilos.
La diversidad es orgullosa.
La vida, como el amor, llega en cualquier circunstancia.