MIGUEL A. CURIEL – POEMAS INÉDITOS «PAPEL DE LIJA»
INTRODUCCIÓN
Por Matías Escalera Cordero
Si hubiese que resumir con un solo sintagma el reto que persigue, la tentativa que la
fundamenta o el punto cardinal que señala al centro mismo de la poesía de Miguel
Ángel Curiel, sería, justo, el de poetizar –esencialmente– «eso que no se dice…» Algo
que lleva persiguiendo con incansable denuedo, desde el inicio mismo de su andadura
como poeta.
Si hubiese que resumir con un solo sintagma la actitud de Miguel Ángel Curiel respecto
a su intima relación con la escritura –con la poesía, sensu estricto–, este debiera ser una
interrogación, ¿realmente la poesía nos exonera de vivir? Definitivamente, una de las
grandes voces de la poesía española de las primeras décadas de este siglo.
POEMAS del poemario inédito Papel de lija [cedidos para Casa Bukowski
por el autor y seleccionados por Matías Escalera Cordero]
1
el sol quema,
eso es el amor,
y la lluvia
moja,
la nada nos ama, la niebla es azul,
negra o amarilla,
rezo
con balbuceos,
ella calma al perro
de dios,
lee una carta
amarilla.
2
una carretera de dolor
es un libro,
tú escribiste
un libro pequeño,
lo querías vacío,
lo llamabas espacio,
lo abro
para vivir más,
oye este poema azul, se oye,
es una carretera,
va directo a las montañas de G.,
es muy pequeño,
eterno,
lleno de hijuelas
que van a todos los lugares,
llovía mucho, me acuerdo,
la forma de amar
cambió,
es seca,
tardé en vivir, en amar,
me exonera de ti cualquier lugar,
eso espero de ti
-eso que no se dice-
3
abre la vía al cielo
con tu poema,
has dejado
caer el sol,
sube
y llévame al azul negro
por la vía oscura,
no hay
diedro,
arista
o cicatriz azul.
4
no cayó el cielo,
cada vez es más alto y azul,
él se envuelve
en ese silencio vacío,
las cruces de humo
se deshacen en la boca,
en la luz no hay amor,
los textos se van sumando,
los amores
no,
son polen,
he escrito contra
la nada,
cada vez hay
más flores,
eso es
la muerte,
pero el que está muriendo
se ríe,
¿qué puede hacer?
reír, agradecer,
ver una luna negra donde juegan al futbol
unos niños que se queman,
y reír,
tensar sus músculos cada vez más azules,
tensar las palabras
hasta que se rompan.
5
bajo la nieve el sol
¿lo ves?
es negro
la flor de ayer
sigue hoy,
al lado de la gran piedra
podría romperla,
solo está
ella,
mañana ya
no estará.
Miguel Ángel Curiel (Korbach Valdeck / Talavera de la Reina, 1966) gana el accésit del premio Adonáis del año 2000 con el libro El verano. Desde entonces su obra poética se aparta de las tendencias poéticas dominantes, hasta desarrollar una voz original en la poesía española actual. Ha sido becario de la Academia de España en Roma (Beca Valle Inclán para escritores) entre los años 2009 y 2010, durante los que comienza a escribir las Luminarias, diarios poéticos en construcción. Entre sus libros destacan El agua, (2002-2012) finalista del premio nacional de poesía 2013. Astillas (2015). El nadador (2016), finalista del premio nacional de poesía 2017. Jaraiz, 2018. Durante los últimos años ha publicado Trabajos de ser sólo hierba y Luminarias 2009-2019. Su obra poética está reunida en el libro Eulalia poesía 2000-2020 (2021), en el que reúne muchos de sus libros más significativos, donde aborda los temas dominantes de su escritura: la escritura, el autoconocimiento y la búsqueda del yo, y el íntimo e inevitable conflicto Eros / Thanatos. Miguel Ángel Curiel es, además de poeta, un notable artista visual. Desde el año 2021, Miguel Ángel Curiel es profesor del master de escritura poética en la Escuela de escritores de Madrid.